El cargador de flores de Diego Rivera es una obra que hace honor a la sociedad mexicana, en particular, a los trabajadores agrícolas. Un ícono que combina el arte con aspectos culturales y de igualdad.
La obra pictórica es una de las más emblemáticas del artista, quien plasmó su visión y legado. Muestra a un hombre mexicano que carga sobre su espalda un gran bulto de flores, presentando así los colores de la naturaleza y rindiendo homenaje a la cultura e identidad del país mexicano.
Diego Rivera: un vistazo al artista revolucionario
Antes de conocer más detalles sobre el cargador de flores, es conveniente conocer a su autor: Diego Rivera, nacido el 8 de diciembre de 1886 en Guanajuato, México. Conocido por ser un destacado artista revolucionario del siglo XX.
De hecho, las obras de Rivera fueron reconocidas a nivel mundial, debido a que fue uno de los principales exponentes del movimiento muralista mexicano. Su estilo artístico distintivo, su compromiso social y político lo caracterizaron como artista.
Obtuvo su formación artística en su país natal, con influencias artísticas vanguardistas provenientes de Europa. Gran parte de su inspiración fue la Revolución Mexicana y la visión que tenía de un país más justo y equitativo.
Fue uno de los representantes del movimiento muralista, así utilizaba el arte para hacer llegar mensajes de tipo político y social. Murales que no solo se centraban en México, también otros países donde quedó plasmada la historia, la lucha y la cultura de los trabajadores mexicanos.
El Cargador de Flores de Diego Rivera: Una celebración de la Vida Agrícola Mexicana
El Cargador de Flores es una de las obras de Diego Rivera, en 1935. Considerada como una de las más importantes dentro de la tradición artística mexicana. Forma parte del movimiento muralista mexicano, el cual se caracteriza por abordar temas sociales en sus obras.
El destacado artista, y otros artistas mexicanos afiliados, tenían el propósito de devolver y compartir el arte con el pueblo, dejando atrás las barreras elitistas. De esta forma, su fascinación por la cultura maya y azteca, al igual que la vida de los agricultores, indígenas y trabajadores mexicanos, se ve reflejada en la obra El Cargador de Flores.
Siendo así, esta obra tan destacada para México y su actividad agrícola. La pintura es un símbolo de unidad familiar en aquellas comunidades rurales.
Historia del cargador de flores
Como parte de una serie de murales, el Cargador de Flores pertenece a una época con mucho auge en el tema de la igualdad social. Fue en el año 1934 que se lanzó un programa que estaba dirigido a los trabajadores del campo.
Justamente, bajo ese programa se creó el cargador de flores, con la finalidad de dar importancia al trabajo agrícola.
Técnica y estilo artístico
En cuanto a la técnica y estilo artístico de El cargador de flores, destacan los siguientes aspectos:
- La pintura fue realizada con la técnica tradicional con pigmentos que se aplican sobre una pared de yeso húmedo, permitiendo así la fusión de los colores y el material.
- Cuenta con una composición de equilibrio y simetría. En la parte central, la figura de El cargador de flores lleva una cesta sobre su espalda, mientras que su esposa lo ayuda con la carga. Esta figura es la representación de la fuerza necesaria para sostener el peso.
- Los tonos de las flores son variados y simbolizan la belleza proveniente de la tierra.
- En el fondo, se muestra un paisaje montañoso con un intenso cielo azul, creando así contrastes con las figuras y las flores.
- La perspectiva de El cargador de flores es plana y bidimensional, inspirada en el arte colombino, con el propósito de representar la realidad de forma simbólica y alegórica.
- El realismo y la asimetría destacan en esta obra de Diego Rivera.
